Tomado de Patrick SK, Noah JA, Yang JF. Developmental constraints of quadrupedal coordination across crawling styles in human infants. J Neurophysiol. 2012 Jun;107(11):3050-61.
¿Sabías que existe más de una forma de gateo? Y aunque no todas/os las/os bebés lo realizan tiene múltiples ventajas y beneficios.
Hay miles de aplicaciones y ejercicios para «entrenar» a bebés a que realicen una postura o que fortalezca esto o lo otro. Si aceptáis un consejo, IGNORARLAS.
Lo primero, cada bebé es un mundo, y cómo tal, cada una/o se desarrolla en función de su estructura corporal, de si existe o no, una limitación de base, pero sobre todo, del nivel de estimulación que reciba.
Entonces diréis, ¿entonces no será mejor utilizar esas aplicaciones? Pues la respuesta es sencilla. No.
No, no necesitan que le enseñes a voltearse cogiéndole y «enseñándole» a hacerlo. Ni necesita ponerse boca abajo para fortalecer la musculatura del cuello. El porteo y estar en brazos es suficiente para ir realizando control postural, pero esto, es otro tema.
Los bebés sólo necesitan algunas cosas: que estés disponible para ella o él y que le dejes el tiempo y el espacio suficiente para poder hacerlo.
Estar boca arriba en una colchoneta y con los estímulos adecuados (sí, no vale cualquiera, y una tablet no es un estímulo adecuado), y movimiento libre, irá realizando movimientos que le irán fortaleciendo la musculatura de las diferentes zonas que tiene que ir desarrollando poco a poco. Y, ¡ojo! Si no ha alcanzado un paso posterior, salvo en algunos casos, como por ejemplo el gateo y andar, todos están completamente entrelazados unos con otros.
Hay unas tablas que no son para nada exactas donde te habla sobre qué edad deberían de tener las/os bebés a la hora de adquirir un nuevo hito de desarrollo.
El primero de todos: el control cefálico. Es capaz de poder controlar su cabeza sin que se le caiga. La norma lo sitúa en torno a los 3 meses de edad y hay niños y niñas que lo hacen antes y otros que lo hacen después y esto, es completamente normal. Aunque si es cierto, que si han pasado 6 meses y todavía no existe este control, visita a su pediatra para que pueda valorar.
El segundo hito importante sería intentar alcanzar objetos que tenga cerca manteniendo la posición boca arriba. ¿Cómo se consigue? Deja a tu bebé en una colchoneta rígida, como esta de Ikea. No, no vale un parque cuna, ni un colchón. Necesita que sea lo suficientemente rígido para que si se mueve, no se hunda, además de alejarle del frío del suelo. Nota fundamental: ponle objetos en ambos lados, para que pueda ir viendo cómo se desenvuelve.
El tercer hito, sería el giro, que no tiene por qué ser el volteo. Gracias al paso anterior, el interés que demuestra le hace querer experimentar, y un día, sin esperarlo, se gira y se queda de lado. La cantidad de musculatura que se ha tenido que ir preparando para hacer esto, va desde la muñeca, codo, hombro, hasta el cuello, la espalda, y a veces, las piernas. Aquí, y siguiendo con la tónica de la importancia de poner a su alcance objetos que le sean atractivos, empezará a intentar alcanzarlo con manos o, incluso, pies.
El cuarto hito, sería voltearse. A parece de la nada, y la mayoría de las madres y padres que lo han visto, ha sido con un gran susto (encima de la cama, en el cambiador), pudiendo llegar a caerse. Al principio les incomoda muchísimo esta postura y se quejarán y será su manera de comunicarse que quieren cambiar de posición, pero será colocarle en la posición boca arriba de nuevo, y giro. Están aprendiendo, están realizando conexiones neuronales que le invitan a seguir haciéndolo, hasta que lo controle. Aquí puede tardar un poco más o menos, el control de «¿qué hago con los brazos?», se han dado la vuelta, pero uno o más brazos se han quedado bajo la barriga y me incomodo mucho. Lo importante es acompañarle en todo este momento para ir viendo estos momentos y actuar en caso de que lo necesite.
Los siguientes hitos, empezar a erguir la espalda e intentar levantar los brazos, (a veces parece que van a hacer flexiones), intentar continuamente realizar movimientos de «desplazamiento» donde a veces lo consiguen o no, le están preparando para el gateo. Toda la musculatura de su cuerpo, está trabajando en sincronía para poder desplazarse y conocer el ambiente que le rodea.
Sólo hemos querido poner el tiempo aproximado del primer hito de desarrollo para no alarmar innecesariamente. Cada bebé es un mundo, si hay algo que te preocupes de tu bebé, no dudes en consultar con su pediatra.
Pero, como viene en la imagen principal de este post, no todos los bebés gatean igual. Está la típica imagen que tenemos en mente, que en este caso y siguiendo con el ejemplo anterior, sería la imagen que se correspondería con la escena A. Pero la realidad es que no sólo se gatea de esa manera. Hay tantas maneras como bebés existen y la imagen del post está relacionada con un estudio de 22 bebés que utilizaban diferentes estrategias para desplazarse por su entorno, siendo las más características, las 6 representadas.
Todas tienen en común múltiples beneficios:
- Ejercita los músculos y desarrolla el equilibrio: el desplazamiento con el patrón cruzado, es el que hace posible que nos podamos desplazar por el medio.
- Hace consciente al bebé de su propia percepción corporal: desarrollando el sistema propioceptivo y el sistema vestibular, ayudándole a tomar consciencia de su cuerpo.
- Mejora el sistema inmune al estar más expuesto a posibles agentes contaminantes donde se esparcen gérmenes y suciedad, como es el suelo.
- Conecta los dos hemisferios cerebrales: creando rutas de información que le ayudará a madurar las diferentes funciones cognitivas, ayudando así para un futuro, a la lateralización del cerebro.
- Desarrolla la coordinación ojo-mano, conectándola con el cerebro, ayudándole más adelante, con la lectoescritura.
- Desarrolla la psicomotricidad gruesa (la del movimiento, desplazamiento), como la gruesa, la que percibe a través de manos y pies, recibiendo en éstos, una cantidad de estímulos.
- Le conecta con el espacio, ayudándole a ser capaz de percibir diferentes distancias y la dimensión que tienen los objetivos.
- Prepara al aparato músculo-esquelético al realizar oposición de la gravedad, ejerciendo presión en ciertos puntos de las articulaciones, que se irán preparando para la bipedestación.
Pero como dijimos antes, no todas/os los bebés pasan por la fase de gateo, pero eso no quiere decir que no vayan a adquirir estos beneficios. Los adquirirán de otra forma o, tal vez, de una manera más lenta, pero seguro que lo adquirirán.
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